domingo, 27 de mayo de 2012

"INSIDE"

Me recosté sobre sus entrañas para escucharlo palpitar, su retozo escueto me dejo fulminado. Parado sobre el centro de la tierra logro observar como gira esta, su velocidad no varia, hay un punto luminoso entre lo indivisible y lo elocuente, entre lo creíble; entonces sigue girando, es devastadora la manera en que rebotan los sonidos, las figuras, el olor; si lo toco quema. Dentro de un pedazo de caucho, solo es cuando logro entender por que te odian y de la misma manera te aman. Te patean para ganar una guerra que creen haber perdido algún día, recobran al niño estilizado que ahora puede decir groserías, se hacen estrellas con nombres y apellidos en tu honor. No cabe duda, se entregaron a ti como tu a ellos. Tu y el mundo giran en la misma dirección, en esa que se llama "SIN SENTIDO" ROBERTO CARLOS VARGAS MENDOZA (ruPErto!!!)

lunes, 14 de mayo de 2012

"LA COPA"

Con las manos listas y abrazando el cielo levante la copa, el momento cumbre llego, de ese mismo modo sucumbí; así como sube la marea y el día de mañana vuelve a su nivel, de tal forma una vorágine de sentimientos recorría todo mi cuerpo. Fue como consolidar una vida que yo creí era de mentira, me pude dar cuenta de su valía, de sus objetivos. Todo aquello como una consecuencia del arrebatador paso del tiempo, el que no da tregua para dejar marcas sobre los pliegues de la piel. El maravilloso olímpico estaba repleto, el zumbido de aquel gentío me dejo por unos minutos en completa ceguera sin escuchar lo que sentía. Me apodaron "SONRISA" es lunático escuchar la voz de un grito corear tu nombre, mi gaféte de capitán tenía bordado las tres iniciales que más amo; las de mi familia, y cuando llegaba a hacer un gol extraña vez no dudaba en besar la cinta con las tres letras. Ser defensa central fue una vocación permanente no solo dentro de la cancha, hasta hoy es mi forma de ser. Un leal albino orangután indulgente, misterioso por cariño a sorprender y ser sorprendido por la vida, natural con el balón bien pegado a la agujeta, don de mando con humildad para aceptar la culpa del portero como mía. Radique en la ciudad de la Luz y me encantaban sus tremendas subidas empedradas, sus tejados rojizos, las aguas del Tajo que son hijas del Océano. Verdiblanco por opción de geógrafo frustrado y conocedor de lo ignorado. Esta enigmática ciudad donde el verano se esconde y juguetea con la madrugada en un despliegue de fiesta y luces me tenía contento por jugar, solo eso, mis condiciones harían de mi un tritón mayúsculo, pero jamás perdí el piso. Mil sirenas fueron implacables, aun así, fui ciego la mayor parte de instantes. Cuando conocí a la que hoy amo profundamente erradique de mi el deseo con matices de ese tipo, me entregue a ella como a la camiseta. Ayer un niño proclamaba palabras y rogaba que me quedara -EH SONRISA NUNCA TE VAYAS- no me pueden pedir eso, en mi mente no existe el deseo con colores nuevos. Solo le mire y abraze mi presencia en señal de agradecimiento, tanto amor dicen por ahí solo lo dan los perros. Pero es distinto en serio, esto de acá; este suceso llamado futbolista me deja satisfecho, con ganas de agregarme hasta el ultimo minuto. Con las mismas ganas como cuando levante la copa por encima del cielo… ROBERTO CARLOS VARGAS MENDOZA (ruPErto!!!)